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martes, 20 de septiembre de 2011

No tengas desaliento...




Cuando nada quede por hacer en la noche
Pues los sentimientos ya se mencionaron,
Cuando no se pueda decir palabras
Porque el pensamiento se nubla en el cielo,
No tengas desaliento
El amor resurgirá con la fuerza de un dragón,
Penetrará en el abismo de tu alma,
Y dará besos en tu cuerpo de esmeralda.


Meditaba con sus ojos caídos en las profundidades de la angustia. La noche se iba reflejando en el horizonte y nada esperanzador era el acercamiento de su dormir. Añoraba soñar con esos paisajes de lugares de belleza descomunal donde las mariposas revolotean entre las flores degustando el néctar de la felicidad. Ver como los pajarillos cantores vuelan libres en el cuerpo del viento y el sol refleja su cara de melodías sentimentales. Deseaba acariciar su desnudez en la piel de un río de aguas cristalinas, mirar hacia el cielo para encontrar un ambiente de ternura que le supiese a libertad, elevar sus manos en señal de alabanza por vivir rodeada de una continua sonrisa en su corazón. Esperaba ese amor de juventud que le trasladase en el recuerdo para volver a ser la flor más bella del jardín de los días cotidianos.

No tengas sueños sin libertad.
De amor se llenará tu cuerpo.
Cuando llegué la madrugá
Y en la penumbra de los latidos nocturnos
Tu cuerpo se colmará de escalofríos amorosos.
La sublime claridad de tu corazón
Se hará eterna,
Y sumirás tu suspiro en un baño de felicidad
Para tener un alegre palpitar en esos lindos ojos
Que escondes en la soledad.


La noche cubría su pensamiento y, en su desnudez, volaba una mariposa que le que proporcionaba palabras de esperanza. Quería ayudarla a suprimir el congojo en el que se había metido. Que levantase sus ojos al firmamento cargados de estrellas para ver en ellas las visiones de emocionantes sensaciones. Su vida era olvidar el sufrimiento, que el tormento fuese a la deriva en el mar engendrando en su corazón el embrujo de la sonrisa. La instancia en el oasis de la soledad, debía tragársela la tierra y , con la lluvia de felicidad, florecer una alegría en su mente que diese vitalidad a sus días. Tendría que apagar las velas del silencio sembrando un gran faro iluminado en su alma para que diese un alegre caminar en el amanecer de sus sentimientos. Su corazón era puro e inmaculado para sufrir las decepciones de la incongruencia de palabras sin sentido. Un ramo de violetas debería ser su vivir .
La mariposa con su aleteo le llevaba a sentir la brisa de la ternura. Quería despertar a ese cuerpo desnudo en la noche para que sintiese que era belleza y el ser más ilustre que ronda la humanidad.


Oratorias a favor de tu alegría,
Valsamos en tu soledad,
Apaga la vida de tristezas
Y vive el camino de la fertilidad.
Tu alma es pura,
Inmaculado tu corazón,
Vive en el jardín de los sueños
Para encontrar tu libertad.

---- paco ---

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